BOCADO CARNAL






Estamos ante una tapa de categoría y todo se basa en manejar aquellos ingredientes y elementos que nos ha podido sobrar del día anterior para combinarlos con un estilo que se preste a un bocado carnal.

En este caso hemos preparado la víspera una cazuela de solomillo de cerdo. Para ello la carne se trocea en rebanadas redondas y para que todas sean lo más uniforme posible se envuelve previamente en un film de plástico y se le da forma cilíndrica para luego cortarlos en trozos del mismo grosor. Estos se pasan por la cazuela para dorarlos y se reservan. Por otro lado se mezcla en un vaso con agua y coñac (aunque en esta ocasión hemos elegido vino de oporto), piñones, nueces, almendras y uvas pasas junto con un poco de tomillo y se deja macerar una hora.

Para el paso final esta mezcla se introduce en la cazuela y se pone a fuego fuerte para que se haga bien la carne y el licor se evapore. Una vez hecho se puede tomar en caliente pero no te olvides de reservar parte del solomillo para la tapa del día siguiente.

Para la tapa final lo que se necesita es tostar un trozo de pan y sobre el mismo hay que untar una primera capa de paté o foie gras. A continuación se derrama una pequeña cantidad de mermelada (preferiblemente de frutas del bosque, frambuesa o de fresa) y por último un medallón de  solomillo decorado con el fruto seco y una uva pasa.

El resultado lo podéis ver en la fotografía que os acompañamos.

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