Hoy os presentamos un pincho extra-sabroso y muy fácil de hacer. Además, tiene la ventaja de que podemos incluirlo en el grupo de pinchos "de aprovechamiento", es decir, de "esos" que se hacen con los restos de otros platos. En este caso, el producto estrella que utilizamos es el pollo. En nuestro caso, unos trozos de contramuslo que nos habían sobrado del día anterior.
Para elaborarlo tan solo necesitamos cortar en "dados" la carne, con la precaución de que no sean demasiado pequeños ni demasiado grandes. En crudo, aderezamos el pollo con un poco de curry, pimienta molida, cayena picada, sal y aceite. Insertamos dos o tres piezas en un pincho de madera y lo colocamos directamente sobre una sartén o una plancha muy caliente. No importa que algunas partes queden churruscadas.
Para la presentación, acompañamos nuestros pinchos con salda "dulce-picante" y un poco de orégano. Están deliciosos y su sabor os sorprenderá.
Y así te lo hemos contado en REE...
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