Crujiente de anchoa con queso


Hoy es domingo.  Día de vermut.  Día de disfrutar con los amigos, pero respetando las medidas de seguridad impuestas en estos tiempos de pandemia. Así que si hoy estas de fiesta y quieres agasajar a tus visitas (pocas) en casa, te proponemos un pintxo muy sencillo, pero eficaz en estos tiempos de coronavirus.

Lo hemos llamado crujiente, ya que la gracia de este canapé consiste en su fila lámina que soporta el contenido del pintxo.  Para elaborarla utilizamos una sencilla rebanada de pan de molde que vamos a aplanar con la ayuda de un rodillo.   El objetivo es conseguir una lámina de apenas un milímetro de espesor.  Para conseguirlo, ayuda eliminar, previamente, las cortezas.  A continuación cortamos la rebanada (que habrá aumentado considerablemente su tamaño) en cuadraditos de unos 4 o 5 centímetros de lado.  Untamos cada lado con una fina capa de mantequilla y en una sartén lo doramos hasta que queda bien crujiente.

Ya solo nos queda elegir el contenido de nuestro crujiente.  A modo de ejemplo, yo os propongo con una lámina de queso havarti, una anchoa troceada y un poco de pimiento morrón.  Lo aderezamos con pimienta y orégano y... a disfrutar.

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