Un clásico de Philadelphia

 


Hoy no so vamos a sorprender.  No os vamos a presentar ninguna novedad.  Hoy, simplemente, os proponemos disfrutar con una receta clásica a base del queso untable de Philadelphia.  Algo sencillo, sano y muy rico.  Se trata de un rollito de calabacín con salmón y queso.

Receta

La verdad que este bocado saludable no tiene mucho misterio, ni una técnica sofisticada.  Tan solo necesitamos una mandolina afilada para poder sacar las "hojas" de calabacín con un grosor adecuado.  Evidentemente, cortamos las láminas de calabacín a lo largo.  A partir de aquí, aplicamos una fina capa de queso Philadelphia.  Tal vez, alguno tenga la imperiosa necesidad de aplicar una gruesa capa de queso.  Nosotros lo desaconsejamos ya que anularás el sabor del salmón y la frescura del calabacín. El siguiente paso es colocar, con delicadeza, unas lonchas de salmón y terminar el producto, enrollando el calabacín.

Truco:  Para conseguir que el rulo no se abra, aplicamos un poco de queso a modo de "pegamento" al final del calabacín.

Lo presentamos en una bandeja, a ser posible, de color oscuro y aderezamos el bocado con un poco de eneldo.   Al ser un producto fresco, es aconsejable prepararlo (es muy sencillo y rápido) en el momento de ser servido.

Lo dicho, un delicioso y refrescante bocado para estos días tórridos de verano  A disfrutar.

Si esta propuesta te ha gustado, aquí os dejamos otras similares:

Torera de salmón                             Tosta de salmón                         Sándwich de Calabacín
                                                         
                                             





Comentarios